La industria del cannabis en Colombia empezó a desarrollarse desde 2016, relativamente hace poco, por voceros del sector quienes afirman que los avances han sido importantes, mostrando evidencia positiva de los usos del cannabis medicinal, científico e industrial.
Por su parte, el presidente, Gustavo Petro, propuso ampliar la legalización del cannabis, cuyo cultivo y comercialización ya está permitido en el país con fines medicinales. Sin embargo, el comercio con fines recreativos sigue penalizado.
“Hablemos: ¿qué pasa si se legaliza el cannabis en Colombia sin licencias? Como sembrar maíz, como sembrar papa”, dijo el mandatario durante un encuentro donde abundan las plantaciones ilegales de marihuana.
En la diversificación de productos colombianos, también ha sido notorio el desarrollo. El país produce gran variedad de servicios medicinales con la planta, pero, con la más reciente regulación de su uso, el sector ha incursionado en los campos textil, cosmético y de alimentos y bebidas, entre otros. A su vez, las exportaciones han ido aumentando progresivamente.
Cabe resaltar, que en el 2019 se registraron US$310.270 en ventas al exterior, teniendo un gran salto hacia el 2020, que consolidó US$5.175.620 según el software de análisis de importaciones y exportaciones Treid. En el 2021, esa cifra fue de US$5.063.200. Entre enero del 2020 y el mismo mes del 2021 ya se registraba un aumento del 65% en las ventas foráneas, siendo Antioquia, Bogotá y Cundinamarca los principales exportadores de productos con cannabis.
Petro ha llamado a terminar la “fracasada” guerra contra las drogas, en la que Estados Unidos es el principal socio de Colombia. Washington dice estar abierto a una “conversación abierta y honesta” sobre el tema.
“Si vamos a legalizar el cannabis, ¿vamos a mantener toda esa gente presa en las cárceles hacinada o llegó el momento de soltar mucha gente?”, planteó Petro, agregando que “se les criminalizó por algo que en buena parte de los Estados Unidos es legal”.