El 22 de marzo es reconocido como el Día del Agua en todo el mundo; esta fecha fue establecida en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo de 1992.
El tema principal de la conmemoración de este año es acelerar el cambio para abordar la crisis mundial del agua y el saneamiento, ya que 1 millón de personas mueren cada año y 74 millones vivirán vidas más cortas como resultado de enfermedades relacionadas con el agua sucia, el saneamiento inadecuado y la higiene deficiente, según a las Naciones Unidas.
Es importante tener en cuenta que el mundo se comprometió con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número seis en 2015, que pretende garantizar que todos tengan acceso a agua potable y saneamiento para 2030. Sin embargo, es bien sabido que la meta no se logrará en los siete años restantes.
Países de todo el mundo se reunirán este año del 22 al 24 de marzo en Nueva York, EE. UU., para la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua, donde pretenden discutir la crisis que plantea el saneamiento del agua. Adicionalmente, se pretende tomar en cuenta compromisos adicionales para la Agenda de Acción, programa que se impulsa para la acción y la rápida transformación de este tema.