El hecho de que la reunión entre la Comisión de Paz del Congreso de la República y líderes sociales de Tierralta se hiciera a puerta cerrada, parece no haber sido del agrado de los habitantes de este municipio, quienes esperaban hacer parte de la mesa de diálogo.
La comisión arribó a Tierralta sobre las 10:30 de la mañana, integrada por los senadores Antonio Sanguino, Victoria Sandino y –entre otros- Roy Barreras, quienes junto a la gobernadora de Córdoba, Sandra Patricia Devia Ruiz, se reunieron en privado con algunos líderes y representantes de organizaciones sociales del sur del departamento.
A su salida, cerca de la 1:30 de la tarde, los esperaba un grueso número de tierraltenses que rechazaban el hecho de que no los hayan hecho partícipes de la reunión, por lo que exclamaban: “Venían a reunirse con el pueblo, pero se encerraron”.
Otro grupo de personas llegó al sitio a mostrar su apoyo al alcalde Fabio Otero Avilés, a quien la Procuraduría ordenó abrir una investigación.
Los senadores antes mencionados se dirigen en este momento a bordo de un helicóptero al Aeropuerto Los Garzones de Montería, en donde brindarán el pronunciamiento a los medios de comunicación.
La senadora Paloma Valencia, quien llegó al citado municipio pero no entró a la mesa de diálogo, expresó que se encuentran “muy preocupados con la situación de Tierralta, una situación que se explica como lo han señalado las autoridades, en el crecimiento de más del 900% de los cultivos de narcotráfico y de la minería criminal”.
Por su parte, el también senador Roy Barreras puntualizó que “la Comisión de Paz viene a Tierralta como va a todas las zonas de conflicto, para que se escuche la voz de los líderes amenazados y lo que están siendo asesinados. Un mensaje claro: a los asesinos no importa quien sea la persona que vas a matar, no la mates, puede ser tu madre, puede ser tu hijo”.
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