El 22 de agosto en horas de la tarde, se entregó de manera voluntaria ante la URI de la fiscalía de Sincelejo, Jesús María Bolaño Castro, el policía encargado de transportar a los 3 jóvenes asesinados en Chochó el pasado 25 de julio.
El patrullero tras saber que había una orden de captura en su contra, decidió entregarse voluntariamente ante las autoridades de Sincelejo en compañía de su abogado, Isaac Castro.
“Decide entregarse porque esa ha sido su intención desde el mismo momento en que ocurrieron los hechos, colaborar con la justicia , desde el mismo momento en que fue citado ante la autoridad disciplinaria” afirmó el abogado Castro.
Tras este hecho, salieron a la luz detalles más concretos de lo que había sucedido ese día, por testimonios que brindó el patrullero.
“Golpean la camioneta y yo me quería bajar, pero no me bajé. Mi teniente Camila baja el vidrio y se escucha a un uniformado que estaba con la cara tapada, mi teniente Camila se asoma, y grita: ‘mi coronel, a la clínica más cercana que estos manes se desangran, Como conductor yo conozco todo Sincelejo”.
Asimismo dijo; “Metiéndome por el progreso (un sector aledaño) yo salía derecho, pero estaba lleno de gente. Ahí fue cuando me dijeron que no me metiera por ahí porque había mucho trancón(…). Entonces, ahí fue cuando escuché que me dijeron que cogiera la vía más larga. Cuando yo arranco, yo prendo las sirenas. De hecho, detrás de mí venía otra camioneta (…). Cuando íbamos por un sector de la vía a Las Palmas se escucha que golpeaban abajo (simula el ruido de unas detonaciones). En mi ignorancia, pensé que eran piedras. Más adelante escucho como cuando uno revienta una bolsa de agua” aseguró el policía.
Por último, se conoció que hay más de 40 órdenes de captura en contra de los implicados de la masacre, principalmente la del coronel Benjamín Núñez, el cual había salido del país. llegando a Panamá y finalmente a México.