El 11 de junio se celebra el Día Mundial del Cáncer de próstata, con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre esta enfermedad e informar de la importancia del diagnóstico precoz y de los recursos y posibilidades para su tratamiento. En esta edición, bajo el lema “Con un par. No te quedes atrás”, se pretende potenciar una actitud de lucha frente a la enfermedad, tanto con la realización de las pruebas rutinarias de cribado, como por parte de los pacientes que han sido diagnosticados.
Según la Sociedad Española de Oncología Médica, cada año se diagnostican en nuestro país en torno a 28.000 nuevos casos. La probabilidad aumenta con la edad, ya que 9 de cada 10 casos se producen en mayores de 65 años. Afortunadamente, de todos los varones diagnosticados de cáncer de próstata, el 97% se mantienen vivos a los 5 años del diagnóstico, cerca del 80% a los 10 años y el 60% a los 15 años, considerando todos los estadios del cáncer de próstata, aunque excluyendo a los que mueren por otras causas.
El cáncer de próstata representa el tipo de cáncer más comúnmente diagnosticado en hombres, por delante del cáncer de pulmón y el colorrectal. Inicialmente, el paciente se mantiene asintomático; mientras el tumor se encuentra localizado en el interior de la próstata (T1 y T2), e incluso si ha invadido la cápsula o las vesículas seminales (T3). Los síntomas se relacionan con la presencia de metástasis en los huesos (dolor, fracturas, compresión medular) e invasión masiva de ganglios linfáticos (edemas de extremidades inferiores).